
En la cama despojados de ropa alguna
Toque mi guitarra para incitar sus suspiros
Y ella recordaba las melodías que nos hacían reflexivos de sentimientos húmedos hace unos meses atrás
Pensé en dedicarle mis poemas de amor,
Pero todos ya los había escuchado antes
Desde las rosas y las mariposas negras, hasta la revolución vanguardista de mis últimos días en pluma
Descubrí que hay ciertos lugares de su cuerpo que podía rozar y estremecer sus órganos más erógenos sin llegar siquiera a asomar su vergüenza
Y en esos tiempos alejados de pascuas, fui feliz
Hasta ahora que no he encontrado la forma de convertir su presencia en pasado
Ni deseo ni debo alejarme de su lógica malcriada
Llegó a tirar mi guitarra al suelo en el cuarto oscuro,
A llevarme directo a la almohada y a declararme un beso apasionado sin razón alguna
No podría encender la luz sin dañar el ambiente
Y no hay ganas de utilizar los ojos en momentos así…
No es tiempo de diálogos…
Ni de música, ni poesía…
Solo hay que vivir.
Solamente queda una razón...Vivir
ResponderEliminarCuando se ha sentido un amor así.
Abrazos
De cualquier forma, cuando el amor es verdadero se deja sentir.
ResponderEliminarMe gustaron tus letras, claras, concisas, sin rodeos.
Abrazos de mariposa,
Diana
Regreso de un frío invierno a estas ansias de vida. A esta luz entre tanta sombra...
ResponderEliminarSaludos muchos, Eduardo. Que tengas lindos días.
y cuando ese momento llega, la razón no cabe, ni sus buenas maneras
ResponderEliminartodo es arrastrado por la pasión
Hermosas palabras que reflejan tu estado de ánimo.
ResponderEliminarMe qudo con tu último verso que es muy positivo:
"Solo hay que vivir" (viviendo vuelven a surgir las ilusines y las ganas de volver a hacer caminos)
Un besote
Sin ninguna duda, solo hay que vivir, hasta el final...
ResponderEliminarFeliz cambio de año Eduardo!!!!!
Besos