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sábado, 21 de mayo de 2011

Padeciendo


Mirando por la ventanilla soy feliz
Desde donde las personas parecen hormigas
Castigado en el balcón de mi habitación
Sin juegos, ni tele, ni cena

Suspiro por aburrimiento
Detrás de barrotes de vidrio
Y he acabado ya con los cuentos
De los muchos autores infantiles

Las rabietas no llegan a mis padres
Que discuten por mi insolencia
Y cuando planeo el escaparme
Volver a casa es inevitable

Aquel mostro en el viejo closet
Ya ni siquiera juega conmigo
Y mis juguetes son aburridos
Suspiro, suspiro y suspiro

En la escuela las clases largas
Y las tediosas tareas de un niño
No hay nada que hacer en casa
Ni siquiera con mis amigos

Las chicas son aburridas
También las viejas del cuento
Y las noticias son pesadas en la mañana
En la noche hablan de otro muerto

Que estúpida enfermedad diaria
Esta plaga de aburrimiento
Y veo a un mendigo feliz
Que se divierte con nada

Así que regalo mis cosas
Me quedo varado en la acera
Viendo a los autos pasar
Y asomarse a un par de suspiros

Me doy cuenta que estoy aburrido
Y comenzó a llorar en sosiego
En verdad que he estado enfermo
Todo este tiempo he estado vivo

Y muerto de aburrimiento

3 comentarios:

  1. Eduardo, a veces te leo y coincido contigo en muchas cosas, tú logras ver la felicidad en un mendigo, yo logro verla en la locura.
    Creo firmemente la locura es una evasión de la realidad, preferimos enajenarnos a no sufrir, a no sentir, a no llorar, quizás por eso me autodenomine un algo loca, loca cuando siento lo que siento y saco afuera en mis letras el dolor, la impotencia y la pasión que me sobrecoge, pero una y mil veces digo, bendita locura.
    Trata de mirar un punto más allá que el inmediato a tus barrotes de cristral, allá a la lejanía algún punto de partida bvrillará, entonces, con toda la fuerza de tus años y tu alma, rompe los barrotes y salta, amigo, salta, al encuentro con la vida.

    Uyyyyyyyyyyyyyy, ves, no puedo evitarlo, es una explosividad y luego respiro.....espero me entiendas.

    Un fuerte abrazo.

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  2. Llega un momento en que todo nos parece aburrido, caemos en una rutina que nos fastidia y que no nos permite ver la belleza que existe a nuestro alrededor...ánimo Eduardo , sal y mira a tu alrededor con los ojos del alma y verás que desaparece ese padecer...besos y un gran abrazo

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  3. Estamos vivos. Esa es la cuestión. Entonces nos divertimos y también nos aburrimos entre tantas otras cosas.

    Saludos atrasados; Eduardo.

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