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miércoles, 6 de enero de 2010

Solo para ti

Este poema se lo dedico a una persona muy especial quien creo sera la unica q pueda entender a cabalidad cada palabra porque es lo que ya le eh dicho tantas veces. es dedicado solo a ella... y para el disfrute de todos


Y mi corazón aun no late



¿Si no estas feliz porque te ríes? Si aun no sabes reír… sabes q al decir lo siento te expones al lamento, que es este de hecho el que me llevo hacia ti. El mismo q me hace ansiar tanto tu despertar, sin siquiera retardar el poema de mil versos que escribes en mi corazón, sin restablecer la opinión que murió antes de salir a la luz… El escritor desenfrenado deshecha sus memorias en un pedazo de papel, dudo que puedas parecerte a el… pero sobrepasas su ingenio, al mantenerte cautiva en tu propio sentimiento.

¿Si no estas triste porque lloras? Si apenas puedes sentir dolor con una espina tan profunda incrustada en tu corazón, apenas si diriges tus plegarias a un dios q no esta. Apenas si sabes soportar sin entender que es lo que duele, apenas si sabes vivir sin frustrar a la existencia. Apenas si sabes sentir sin confundirlo con tortura… y aun así es hermosa la luna cuando se posa en tu apogeo, cuando dispersa las brumas del calor y el desespero, cuando refleja en tus ojos el paisaje mas nocturno… y es que la noche solo es noche cuando tu estas mi doncella… y es las estrellas (cada una de ellas) solo son los frutos de vientre, y es que apenas puedo esperar el solo verte niña mía, solo siento que estoy completo cuando tu me dices que sigues viva dentro de ese cuerpo tan callado…

Cuando tus labios se humedecen una vez al mes del año… para diagnosticar el ensayo de la enfermedad del romance antiguo… el veneno de tus venas… la cúspide de tu grandeza reluce solo en tu callar que intensifica el bienestar del cosmos que nos rodea. El equilibrio de este mundo.

¿Si no me pierdes porque me buscas? Si siempre eh estado aquí sentado… amarado al farol deshecho que han dejado en mi alma. ¿Como voy a escapar de ti? Si tu veneno me hace falta... no quiero desintoxicarme de quererte mi princesa porque esa es mi razón para estar aquí a tu lado… porque es lo que eh esperado después de tanto sufrir… ¿Que es lo que puedo decir cuando ya has escuchado todo? ¿Que es lo que puedo pensar sin salirme de tu enfoque?

Si es que piensas en mi entonces esto es inútil, si es que eres feliz entonces estoy difamando, si es que el mártir en mi aun te sigue molestando… matare a las arpías q me asechaban hace poco y a las mariposas negras que no paran de aletear… y al demonio de la soledad que nos mantenía cautivos, pisoteare los pergaminos que firman mi destino con otra mujer y encontrare en mi ser ese alguien a quien tu buscas…

Te daré la salida y la entrada a mi vida oscura y limpiare tus penurias con mi rara sobriedad, ahuyentare a los fantasmas y me quedare contigo… pase lo que pase si piensas que aun es poco que a tu resplandor me ate… no te preocupes mi princesa mi corazón aun no late… por lo tanto aun no estoy vivo.

domingo, 3 de enero de 2010

Mascaras


Las mascaras de la doncella


La verdad ya eh experimentado el nacimiento de una ideología y la lingüística se paraliza ante el subdesarrollo de esta y se crea un vació, probablemente puedas pensar que incorporarse al avance es inevitable para vivir el día a día.
Pero no te pierdas, no te atrevas a dejar de pensar ¿puede aquella llovizna carente de humedad expresar tu sentimiento? No me digas que lo sientes por que ahora yo lo siento, te seguí hasta perderme en tus palabras vacías, “no te arrepientas de creer en un corazón roto” diría un poeta enamorado. Seria un tonto sin remedio si me quedara a tu lado después de tal tropiezo, y ahora envejece mi espíritu y me lleno de llanto gris, ese que nos separa de la palidez del alma envenenada, un suicida irreverente se vuelve el corazón cuando pierde la esperanza dada, en un minuto involucrado y al otro sin voto ni voz, se marchita tristemente.
En tu mascara denoto una arruga de pasión, inclemente la tristeza, sea esta tu inocencia o un voto de perdón, para leve independencia, no doblegues tu razón, yo mantendré mi firmeza… pero… tu te desbordas cual esperma de una vela ¿Qué no hay nada en tu intención que sea real? Me desespera tu insolencia, me niego tu verdad, no te creo… ¿que mascara utilizan los valientes? Si el temor no los afecta, puede que en ellos encuentres un indicio de humildad, pero exagerara en carencia su sentido del vivir pues muertos están los pobres cuando acaban de sentir que han caído en un abismo, yo no diría lo mismo de tu persona, pues se que cuando estas sola tu mascara te protege, ¡no te alejes! No mi diosa ¡no te alejes mi doncella! No te alejes mi tormento.
Si el pensar en ti me mantiene despierto, y el despertarme me mantiene pensando en ti, no requiero ni un instante para desprender tu mascara y mirarte a los ojos no requiero de un diamante, ni del llanto de un infante…
No requiero abandonarte para dejarte sola, pues aun en mi compañía te acurrucas en el aire solitario, y estando yo presente puedo enternecerme con tu lenguaje tan callado, y estando yo a tu lado no hay mascara ninguna que puedas ocúltame.
No te creo si me mientes, no te creo pues engañas, solo admitiré tu palabra cuando la expreses sin marañas, y te ocultare la verdad y te mostrare la mentira si eso te hace feliz, no me importa la nobleza siempre y cuando tu respires, no me importan los principios ni me fijo en la belleza, y rasgare mi mascara cantal de resguardar la tuya siempre y cuando se mantenga tu inmortal independencia.

El manicomio maldito


El manicomio maldito


Una mirada hacia atrás por mas breve que sea, siempre nos regocija… por mucho que dudemos el estar inquietos, por mucho que ansiemos seguir adelante, aunque tenga un leve ardor, picante y desagradable nuestra perspectiva del ayer. Ni una mente inestable desecha sus recuerdos, porque son estos la base para justificar su incapacidad, la trayectoria indeseable, esté llena de vicios, errores y excesos siempre será la puerta a nuestra actual realidad, y el “hoy” no es mas que las cenizas del incendio, las cicatrices de los golpes dolorosos de la vida, la bienvenida perdida a lo que llamamos futuro, el camino tan duro para justificar nuestra existencia, y morir con decencia después de un tan complicado vivir.
Ahora… me resulta más placentero hurgar en el pasado de los demás, después de todo mis heridas siguen frescas, y las costras por muy grotescas no deben arrancarse, pero actuó de observador, en el sanatorio mental en el que eh llegado a parar después de los atentados del demonio contra mi, me facilito aun así convivir entre dementes, ya que estos son decentes, mas cuerdos que los de afuera debo decir, mi diario sigue manchado por el desbordamiento de pasión, como mi única posesión, este libro glorificado con mis épocas mas duras, mis momentos de tristeza, mis tiempos de amargura y mi indecorosa nobleza que yo mismo eh proclamado… mi diario esta latente aun mas que mí corazón, ya que toma su lugar, resguardado por mis manos aùn mas seguras que mi pecho, este dilata el estrecho por el cual me veo cautivo desde determinado período.
El estado de los personajes con quienes convivo es poco diagnosticable, tal es el caso de Samuel, dice este que su padre le heredo un gran poder, una llave a la imaginación teniendo este el control de la madre naturaleza, con tal certeza en su mirada presumía su habilidad, ¿en verdad es esto locura? o quizás la pura ingenuidad de un niño necesitado, que al convertirse en hombre se niega a adaptarse a su entorno, y refugia su carencia con una sabana de luz, explicándose así mismo los fenómenos que vivía, recuerdo que uno de estos días llegue a acercármele al notar lo sereno de sus gestos.
-¿Al estar en este lugar como puedes armonizar, en tu mecedora con vista? (pregunte escéptico)
-¿Que no es lógico? (me dijo) estoy aquí esperando a que la naturaleza llame, pues esta es mi familia, después de tanto tiempo de convivir en el exilio encontré mi gran amor, el miraje de las praderas florece en mi corazón, y la caída del viento me llena el alma… lo dulce de la calma de los árboles silvestres, el cantar armónico de las aves en sus nidos, el penetrante latido del corazón natural, que le da mas vida al mundo que al mismo ser humano, pues este no es mas que profano del jardín celestial que yace en este cosmos.
-Te entiendo de hecho… (Susurrando le respondo) apasionado por las palabras que mis oídos aplaudían, ¿Por qué vivir en la agonía de esperar a ser querido? si no hace falta mas que una dirección en que enviar nuestro amor. ¿Dicen que tu pasión hacia el ambiente es locura? ¡Que maldita sociedad! ¿Donde queda la hermandad que nos brinda nuestra raza, si con crueldad desplaza a los soñadores al confinamiento?
Me rehusó a estar de acuerdo a toda esta suciedad, y niego mi parentesco con todos estos vagabundos, que no encuentran ni en lo profundo de sus almas entendimiento, el capricho los ha cegado y los consume con el tiempo, la necesidad de evolucionar ¡dementes ellos, que no ven la realidad! y se burlan de nosotros, aunque con poca cabalidad entienden a los demás, se disponen a conflictos de magnitudes mundiales, y destrozan los hogares de familias esperanzadas, y claman por ídolos impotentes ante dios y su magnifica certeza de amarnos para siempre, son estos dementes los que deben estar cautivos,
Los que matan a la gente por dinero en sus bolsillos, los que mienten fácilmente para encontrar el perdón, los que venden sus almas para vivir un día mas, ¿es esa la cordura? El amor nos vuelve locos pero a punta de pureza, que elimina la maleza de los malos sentimientitos, si la pasión nos domina se convierte en obsesión pero ni esta en su explosión se compara con la codicia, que el planeta a adoptado como doctrina indispensable para alcanzar la grandeza.
Después de un dialogo improvisado de hermosos puntos de vista, el individuo Samuel se deleita con mis palabras y dispone a levantarse, (sonriendo)
-Déjame presentarte a mi familia en el jardín, se que al venir les serás de grata compañía
Señalando hacia las flores y a los árboles del pateo comunicándose con ellos cual personas allí paradas… me presenta con orgullo. Impresionado concluyo que es cosa de su ingenio, prolongada su charla se torna en discusión y con temor lo detengo, maldiciendo a la hiedra que brota desde el piso, me quedo sin aire pues su “don” que tanto honraba, no es mas que lo enfermizo de una obsesión concentrada en la viva naturaleza,
Pobre alma desorientada, dos figuras lo levantan y lo llevan aun encierro, después de tanto entendimiento, yo charlaba con un loco, y los demás que ahí yacían no eran diferentes a èl, que trinchado descubrimiento, vestigio de arrepentimiento, quería marcharme de ese infierno, no era mas que obvio mi patético vivir, en mi lucha por existir no eh parado en un refugio, nocivo manicomio que me mantenía prisionero.

sábado, 2 de enero de 2010

La noche que murió la luna



Atrincherado en la oscuridad de una azotea perdida, en las instalaciones olvidadas por la gente común, con tristes acompañantes que preferían el día a la hermosura nocturna, blanco de mi vigía en mis noches de óseo. Las estrellas milagrosas son mi única compañía grata al entendimiento, y su misterioso acento de silencio me apacigua, como comunicarse con dios a la manera antigua y en el glorioso firmamento depositar tus esperanzas… no es exceso de confianza mas bien una llamada a la dulce armonía que en mi tiempo me acogía y consagraba mis sueños, el desvelo que hoy me somete mas que una tortura es una breve dosis de tranquilidad, ¿serán las drogas acumuladas? O mi gran habilidad para escaparme de lo triste.

El sereno de la noche me limpia los pulmones y hasta lo sucio del alma, la respiración profunda nivela mi karma con cada exhalación, y los sonidos de la ciudad que yacían apartados no arruinaban mi velada. La transición del tiempo rompía las barreras de lo posible solo para complacerme y regalarme el momento que tanto esperaba, con mis ojos cerrados y el orgullo atrancado por la libertad y el afecto, estando despierto gozaba de mi sueño preferido, el de disfrutar el mundo sin ningún testigo, con el simple echo de haber estado vivo, con el simple hecho de aun no haber muerto.

La capacidad de disfrutar estos momentos no es innata por desgracia, se gana con la madures de vivir el día a día, y con la simple alegría de poder mirar la luna, ya que es esta la cuna de las estrellas venditas, la madre del firmamento fúnebre que despide el día, y lo detesta por su gloria... aun así es la fuente del amor apasionado, porque los jóvenes templados por el vigor del amar, reconocen a la luna como templo sensual y bajo su luz justifican sus encuentros, con daños a terceros o violaciones a las reglas de la sociedad... todo da igual para estos animales, que en su ternura desenfrenada buscan volver a nacer, esta vez con el placer de ser acompañados de aquel a quien han encontrado después de tanto buscar.

¿Te has preguntado porque es tan hermosa la luna? (susurra en mi nuca una voz)
Volteándome desprevenido, como criatura de dios, la hermosura de una joven me deja sin aliento.

-Con el transcurrir del tiempo, como ha de forjarse una estructura, ¿Por qué no un templo divino? (Respondí empedernido)

-Que hermosas palabras para un individuo cautivo en su soledad ambigua… ¿o es la antigua explicación que justifica a los necios?, (incentiva una platica mi acompañante misteriosa, con la mirada curiosa de un niño al nuevo mundo)

-¿Conoces tu la respuesta a este enigma ten profundo?... no es que sea un vagabundo con intuición masiva, ni que niegue los enigmas que carecen de certeza, o que no vea belleza en la simple explicación de una joven de tu calibre... como pensador tan libre yo te doy mi bendición y la leve precaución de que no soy muy seguro, mis amigos no son materiales, pues estoy falto de ese tipo de amor, y la idea de la libre expresión es la base de mi poesía, de mis pensamientos trucados por mi gran melancolía y mi negación a Dios como ser que da la vida

Pero te doy la palabra mi doncella de la noche para que te regocijes con mi tosca aceptación…

- Acepto tu invitación mi melancólico poeta que ah llegado hasta lo absurdo de sus pensamientos libres, no es que me someta a tu mal interpretación, o que falte de modales si es que ahora sirven (prosigue la doncella…)

Y es que estoy acostumbrada a callarme mis historias de las épocas místicas de las que me gusta hablar, no me gusta conversar de los años antes de… ni la explicación o los "porque" de los fenómenos naturales, pero déjame decirte que esa amante solitaria a la que llaman luna tiene una fábula antigua que recuerdo con penuria y tristeza desde luego

(Nos miramos frente a frente mientras tomaba mi mano y me robaba el sueño que se asomaba previamente)

*Dicen que en una tierra lejana entre el desierto y los mares, y los exóticos paisajes que a ella sometían, había nacido una criatura bendecida por sus tantos dioses, seria la víspera del día o la gran melancolía que regocijaba a su padre, rey entre reyes, pero la luna que yacía en la estela de su hija lo llenaba de ternura, y vio en los ojos de esta que una vida a gran altura la llevaría a las estrellas.. El sin fin de epifanías que a este hombre asechaban dictaron el nombre de ella… Luna, cual faro de su nacimiento, cual maldición de su destino... porque esta no dormía…

Días pasaron y su padre rebuscaba un antídoto para su hermosa princesa, los doctores de la realeza nunca hallaron dicha cura, ni los brujos por supuesto… hasta que a los dieciséis (16) meses como un ángel desde el cielo o demonio desde un cráter, apareció un mensajero, inyectándole un veneno a la hermosa muchacha que la forzaba a dormir…

(Una historia poco creíble, si me permites decir... pero vamos continua…)

Todo marchaba a flor y miel, hasta que sin previo aviso la joven chica se enamoro... era normal en esta edad y confinada a ese palacio que el amor involuntario atravesara despacio su frágil corazón.

Un sirviente desde luego... como único visitante que escuchaba sus penas. Y una mirada ajena siempre eriza la piel de una doncella atrapada, asfixiada por las cadenas de una protección innecesaria, y agobiada por la rabia de vivir siempre cautiva.

Escaparse era la única manera de vivir con su amante pera siempre, aunque demente la idea le irradiaba un gran alivio... su amante tan devoto propuso la fuga por la noche mientras todos dormían, mientras todos descansaban ellos se entregarían a las arenas de la pasión y como única condición el tenerse el uno al otro.

Pero llegada la fecha, incrustada en su balcón, la princesa lo esperaba… esperaba y espera... ni los gruñidos de los guardias atrapando a un intruso, ni el pasar de los días, ni el comer incluso, la apartaban de su vigía... ni su padre llorando asiéndole una petición, ni el sonido amargo de una fuerte ejecución que asechaba al prisionero…

no dormía la princesa y derramada su tristeza se escurría por el suelo.
Siempre mirando la luna, como meta de su anhelo, su corazón se rompía, sostenido por un pañuelo obsequiado por su amante. A los diez días colapso sin mas remedio, y su cuerpo casi seco que casi nada se parecía a la bella princesa. Su padre la recogió llorando por que era un cascaron vació.

Y el rey se lamento por no dejar al albedrío los sentimientos de su hija, alzo su rostro ante la interminable noche y glorifico su vista al ver a su heredera, dirigiendo las estrellas en espera de su amor... y fue testigo con horror como la profecía se cumplía, sin traerle alegría, pues su hija yacía victima de su error, con el amor que da ninguna pues acababa de presenciar la muerte de la hermosa luna... y el nombramiento de una nueva*

Inspirado por el estelo que esa historia producía pocos tendrían palabras, mi corazón retumbaba como una oportunidad para ver nacer el amor y mi triste opinión a ella poco le importaba, vendita tú doncella que me mostraste la luna con tus palabras doradas pues estoy impresionado... y aunque suene raro creo que ya la conocía, pues mi cuerpo me pedía que le declarara un beso.

-Te ves poco prepeso a creerme una lunática por mi historia alocada (susurra en mis oídos)

Yo por favor te pido me des tu nombre doncella, pues irradias una luz semejante a la de una estrella y con tus ojos me inspiro a mirar el firmamento. (Le digo)

Pues soy Luna de hecho… mi poeta melancólico con el talento lógico de juzgar a las personas.

Pero estas son las horas en que debo de marcharme, solo recuerda querido que tu corazón siempre te exige lo que el cuerpo no puede darte, y que echarte llorar nunca es la mejor opción cuando se sufre por amor…
Nublándose el panorama mi sueño me derrumba en pleno amanecer, y solo me encuentro bien cuando ya eh despertado preguntándome exaltado por aquel hermoso ser.

Despreocupado y ansioso me doy fuerzas yo mismo, el encuentro casi nostálgico con una criatura divina.

Y ni la radiante luz del pleno día opaca mi aurora de fe, y es que por fin encontré una llamarada de esperanza entre estresante sufrimiento, un breve calentamiento para la gloria que me esperaba, una verdadera llamada de mi destino en el firmamento.